Una reflexión
¿Cómo podemos despertar el interés de los niños por las actividades artísticas cuando, aun estando en la era de la experimentación, han perdido el interés por ellas?
Este verano quise crear unos talleres artísticos ideales para niños.
Talleres que estimule y despierte el interés por la creatividad, les impulse a ser la mejor versión de sí mismos y que nada les parezca imposible.
Considero que la creatividad es incompatible con el aburrimiento.
Actividades como dibujo, manualidades, pintura para desarrollar las habilidades artísticas para desconectar de las actividades del curso escolar.
Talleres que siembre la semilla de la creatividad, la fantasía, los sueños, el optimismo, el encanto y la conexión con uno mismo y con la imaginación.
Unos talleres donde se puede dar vida a mundos fabulosos que hacen la vida más bella, más fácil, más placentera y más positiva.
Para llegar a conseguir todo eso: disfrutar del arte de crear y dar sentido a todo lo que haces, es importante que te guste, que deposites todo el interés y tener paciencia “los artistas no nacen, sino, se hacen”.
La creatividad nos acompaña en todo lo que hacemos. En la edad infantil es aconsejable desarrollarla ya que es un recurso nato y forja nuestra personalidad en aspectos positivos como: la empatía, la reflexión, la paciencia, búsqueda de soluciones…
La resiliencia es fruto del tiempo que dedicamos dedicamos a crear, reflexionar sobre ello, entender el porque de las cosas y como mejorarlas.
